Esta semana me encuentro indignado. De verdad. Mucho. Y por dos motivos que recaen sobre el mismo juego.

Me acerco, como cada fin de semana, a la sección de novedades de la asociación a la que pertenezco a ver qué me encuentro y lo primero que pienso es que alguien se ha confundido y ha mezclado un juego viejuno con las novedades: Dixit.

Pues no, pacientes lectores, no es un error humano -al menos no de nadie de la asociación- sino que nos llega ooooooootra caja de Dixit. Esta vez, con olor al ratón Mickey. ¿No tenemos ya demasiadas cajas de Dixit? Pero lo curioso es que pasa con un montón de títulos: Dobble, Código Secreto, ahora Dixit… cajas y más cajas del mismo juego una y otra vez con un dibujito de portada diferente. Y lo peor de todo es que las compramos.

A ver, que no tengo nada en contra de Dixit ni nada en contra del ratón-que-tiene-un-perro-como-mascota, pero ya está bien de intentar colarnos una y otra vez lo mismo en vez de innovar. Y tampoco es que esté pidiendo más novedades, que ya tenemos bastantes -otra vez, demasiadas, como las cajas de Dixit– sino que se esfuercen las editoriales en buscar y publicar juegos buenos, que en el fondo debería ser su trabajo. Ahora mismo vivimos en una dualidad: o sacamos todo título que llegue a nuestras manos, sin criterio, sin prestarle atención; o sacamos una y otra vez el mismo, ese que funcionó hace 15 años, pero en una caja de otro color, para seguir estirando el chicle.

No, señores y señoras editores, no hay que seguir sacando cajas de Dixit. Hay que seguir sacando Dixit, claro, pero el de siempre, que la gente no necesita que los engañen pensando que es una expansión o un juego diferente. Ahhh, que cuesta trabajo acercarse un juego y ver si está bien pulido, si da lo que promete, si no tiene erratas, en resumen, si funcionará bien en el mercado; que cuesta trabajo mimarlo, darle cariño, producirlo bien y acompañarlo de la campaña de marketing que se merece; que cuesta mucho apostar por un título porque crees en él. Mejor sacamos 200 novedades, que alguna venderemos, o le ponemos a Mickey a un clasicazo y a volver a venderlo.

Pero no es todo. Empezaba esta pequeña entrada diciendo que estaba indignado por dos motivos. Ahí va el segundo: resulta que me entero además, charlando con la gente de la asociación, de que justo este título llega contado y posiblemente no llegue al fin de semana que viene. Y hasta parece ser que hay algunas cartas promo por ahí dando vueltas que solo San Wallapop podrá conseguir. Como decía el gran Dr. Maligno, pero bueno vamos a ver Scott… o sea, que no solo me sacas el juego de siempre con unas orejas grandes y negras sino que además me sacas pocos, y te preocupas de que la gente se entere de que son pocos, y así todo el mundo lo habrá comprado antes siquiera de pararse a pensar que ¡es un juego que ya tienen!

No sé, igual yo soy muy rancio, pero hay cosas que no entiendo. Cualquier comentario es bien recibido. Pero las editoriales mientras a lo suyo… ¡Dale Perico al torno!

Un comentario en “Y dale Perico al torno

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